Capturando la esencia de lo cotidiano
"Fotografiar es colocar la cabeza, el ojo y el corazón en un mismo eje." Henri Cartier-Bresson
La fotografía de calle, o street photography, es mucho más que apuntar una cámara y disparar en la ciudad. Es una de las disciplinas más desafiantes en el mundo de la fotografía. No hay iluminación controlada, los sujetos no posan y las escenas cambian en cuestión de segundos. Requiere agudeza visual, paciencia, rapidez y, sobre todo, una gran dosis de sensibilidad. Pero, cuando consigues ese "instante decisivo", como lo llamaba Henri Cartier-Bresson, las recompensas son inigualables. Las mejores imágenes de la fotografía de calle capturan fragmentos de la vida diaria que, por lo general, pasan desapercibidos, revelando la belleza en lo ordinario y la historia detrás de lo fugaz.
Foto de Jakob Owens en Unsplash
El arte de estar
en el momento correcto
La fotografía de calle tiene una relación especial con el tiempo y el azar. No puedes controlar lo que sucede a tu alrededor, así que parte del trabajo es saber esperar y estar listo cuando algo interesante ocurra. Eso significa prestar atención a los detalles que otros ignoran: una mirada curiosa, una sombra que cae en el lugar exacto, el cruce de miradas entre dos desconocidos. A veces, esos momentos duran milésimas de segundo.
Es clave tener paciencia y estar preparado para lo inesperado. Las ciudades están llenas de sorpresas, pero si no estás atento, podrías perder la toma perfecta en un abrir y cerrar de ojos. Y lo más importante: el azar es tu amigo, pero solo si estás listo para aprovecharlo.
Aunque no necesitas la cámara más cara del mercado para hacer buena fotografía de calle, sí es importante tener un equipo que te facilite la tarea. Aquí van algunas recomendaciones:
Cámara discreta o móvil: En la fotografía de calle, lo último que quieres es llamar la atención. Una cámara pequeña, ligera y discreta es ideal. Las cámaras sin espejo (mirrorless) y las compactas son perfectas para esto. Modelos como la Fujifilm X100V o la Sony A6400 son populares entre los fotógrafos de calle por su tamaño compacto y alta calidad de imagen. En la actualidad no se puede dejar de pensar también en la calidad cada vez mayor y mejores prestaciones de los móviles como los iPhone, sencillos, ligeros y que llevas a todas partes.
Lente fija (prime): Las lentes fijas, como un 35mm o un 50mm, son las favoritas para la fotografía de calle. Ofrecen una distancia focal que se asemeja mucho a la visión del ojo humano, lo que permite capturar escenas de manera más natural. Además, al no ser zoom, te obligan a moverte y a pensar más en la composición.
Baterías y tarjetas extra: Las mejores tomas a veces llegan al final del día, así que asegúrate de tener suficientes baterías y espacio en tus tarjetas de memoria.
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Pero quizá más importante que el equipo es conocer el lugar, Aunque el azar es una parte fundamental, conocer la ciudad te da ventaja. Investigar las zonas con mayor actividad o escenarios visuales interesantes te puede dar una ventaja a la hora de componer y jugar con las luces y sombras para crear imágenes más dramáticas. Las horas doradas, es decir, al amanecer o al atardecer, suelen ofrecer una luz suave y cálida ideal para la fotografía de calle.
También hay que tener en cuenta que la clave es no interferir en la escena. El arte de pasar desapercibido. Si las personas notan que las estás fotografiando, su comportamiento cambia por ello esencial intentar ser parte del entorno y moverte con naturalidad. Observar y esperar ese segundo perfecto, el “instante decisivo” donde todo se alinea: la luz, la composición, el gesto.
Hoy en día, la fotografía de calle está más viva que nunca, y gracias a las redes sociales, podemos descubrir el trabajo de fotógrafos de todo el mundo.
Uno de los fotógrafos más interesantes, y muy activo en redes, donde no sólo te muestra su proceso creativo sino que comparte tutoriales y recomendaciones es Eric Kim.
Valerie Jardin, conocida por su enfoque minimalista y emotivo, Matt Stuart cuyo trabajo se caracteriza por un agudo sentido del humor o Daniel Arnold, con un enfoque crudo y a menudo humorístico, son otros ejemplos a los que no perder el ojo.
La herencia de la fotografía de calle:
¿De dónde venimos?
La fotografía de calle tiene sus raíces en el siglo XIX, cuando las cámaras se hicieron más portátiles y los fotógrafos comenzaron a explorar la vida urbana. Sin embargo, el verdadero boom de la disciplina llegó en el siglo XX, de la mano de fotógrafos como Henri Cartier-Bresson, quien popularizó la idea del "instante decisivo". Con su Leica en mano, Cartier-Bresson revolucionó la fotografía de calle, demostrando que una escena mundana podía transformarse en arte.
Otros grandes nombres como Garry Winogrand, Robert Frank y Vivian Maier siguieron sus pasos, cada uno con su estilo único. Winogrand capturaba la energía frenética de Nueva York, mientras que Maier, una niñera desconocida hasta años después de su muerte, nos dejó una vasta colección de imágenes íntimas y profundas de la vida en las calles.
Fotografías de Vivian Maier
La fotografía de calle es una de las disciplinas más emocionantes y desafiantes del mundo de la fotografía. Requiere paciencia, rapidez y una gran capacidad de observación, pero las recompensas son inmensas. Así que, si alguna vez has querido probar suerte en la fotografía de calle, ¡sal ahí fuera! Camina por tu ciudad, observa los pequeños detalles y atrévete a capturar la vida tal como es, en su estado más crudo y honesto.
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